No es temible la muerte, sino la muerte vergonzosa.
Menandro
Una muerte honrosa puede glorificar
aún una vida innoble.
Cicerón
Un bel morir tutta una vita onora.
F. Petrarca
Quiero morir de forma singular.
Grafiti (Bogotá)
Releo el ensayo
de Mario Praz sobre la belleza medusea y reparo en la cita de unos versos de
Baudelaire que dicen:
El
amante, jadeando, inclinado sobre su amante,
parece
que agoniza, acariciando su tumba.
Me estremezco y pienso que
eso sí sería un bel morir, dejar de ser
en el mismo instante en el que todo fluye y todo reposa. Morir en cada beso, saliva, para
renacer después siguiendo los ritmos milenarios.
Sí, eso sería una bella muerte, poco honrosa tal vez,
pero... ¿a quién le importa la gloria?
Nunca he creído en la épica heroica de
la muerte. Esa ilusión ancestral sólo ha servido para justificar guerra y
destrucción a lo largo de la historia. Un engaño más de estados y confesiones religiosas
para controlar la voluntad de los individuos.
Prefiero,
si puedo elegir, una vida plena, llena de placeres y deseos satisfechos, con la
que poder honrar a la muerte.
Fuente: Luke, nº 34, 2002.
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